«Un viaje sensorial alrededor del mundo que rinde homenaje a la ruta de las especias”, así describió Rosa Vaño el nuevo producto, aceites con especias, de Castillo de Canena, cuya presentación oficial a la prensa tuvo lugar recientemente en Madrid.
Arbequina & World es una colección de cuatro aceites de oliva virgen extra de la variedad arbequina, macerados artesanalmente con una selección de especias, de extraordinaria calidad sensorial, de América, Asia, Europa y África.
Un producto innovador con una gran historia que contar, como ya es habitual en Castillo de Canena. En este caso evocando el comercio de las especias, los viajes y descubrimientos, el galeón de Manila, en el que via Acapulco y Veracruz llegaba a España las preciadas especias de Asia y América, “una colección que surge de la búsqueda de nuevas y elaboradas sensaciones que envuelven el aceite de oliva virgen extra” con recalcó Rosa Vaño.
En la foto con Marcos Regera, asesor gastronómico y maestro «picolier» que ha colaborado con Castillo de Canena en el desarrollo del este nueva colección.
El lanzamiento de Arbequina & World coincide con el quinceavo aniversario de Castillo de Canena Olive Juice S.L., la compañía que crearon los hermanos Rosa y Paco Vaño con el objetivo de producir y comercializar aceites de oliva virgen extra de calidad Premium a partir de aceitunas cultivadas en la finca familiar.
Creo que ninguno de los que fuimos testigos entonces de la irrupción en el mercado de Reserva Familiar picual, primer producto de la marca, podríamos haber imaginado que Castillo de Canena se iba a convertir en un referente del sector oleícola a escala internacional.
Y todo ello, asómbrense, sin inversión publicitaria; pero eso sí, con enormes dosis de trabajo, inteligencia, tesón, imaginación y capacidad de gestión e innovación, junto a un perfecto dominio de las técnicas de marketing y comunicación.
Un proceso de generación constante de valor, no solo para la marca, sino también para la compañía mediante un decidido compromiso con la protección del medio ambiente y la sostenibilidad.
Es de justicia reconocer igualmente su contribución, generosa y siempre eficaz, en todas aquellas iniciativas orientadas a la promoción del sector oleícola jienense y español en el mercado nacional e internacional.
Desde aquí, nuestra más sincera felicitación a los hermanos Vaño, y a todo su magnífico equipo, con un recuerdo muy especial para su padre, Luis Vaño, cuyo ejemplo, apoyo y estimulo han contribuido a que Castillo de Canena sea mucho más que una gran marca, todo un modelo digno de estudio en las escuelas de negocios.